¿Es tu perro de esos que se asustan con el ruido del aspirador? ¿O de los que ven en la fregona y la escoba a dos armas peligrosas? Si, ante la presencia de estos tres limpios enemigos, tu perro opta por quedarse muy quieto en su cama es posible que, sin saberlo, seas una persona con mucha suerte, porque si ya dedicar un día a la limpieza no suele resultar muy divertido, hacerlo bajo la estricta vigilancia de tu perro, te aseguro, no hace la tarea más fácil.